HUBO UN TIEMPO DÓNDE SE ERA (2)

  Cuca, 57

Y me volví a quedar dormida. Regresé al tiempo donde se era, donde no existía la dualidad, hasta que apareció un ser extraño que convenció al primer hombre de que había cosas buenas y malas, blancas y negras, día y noche, luz y oscuridad, amor y miedo… y él le creyó. Las mujeres, portadoras y receptoras de la sabiduría del mundo donde se era, sólo transmitían información a los hombres en el momento en que debían actuar, ya que ellos eran el principio creador. Observaron que algo se había infiltrado por el cambio de comportamiento en los hombres. Enseguida localizaron al extraño, pero querían saber por qué quería engañar a los hombres. El engaño llegó hasta el punto de convencerles de que no necesitaban el Fuego Creador porque ellos ya lo eran pero no se habían dado cuenta. Sólo necesitaban que el extraño les ayudara a ser ese Fuego Creador. Las mujeres seguían observando, hasta que se llevó a varios de ellos y volvieron desestabilizados y perdidos, en un puro caos. Los hombres no entendían qué había pasado. Ya no tenían esa conexión directa con el Fuego Creador, aunque no les habían desconectado del todo porque no habían podido. Eso era lo que quería el extraño y no tenía, y con engaños había intentado quitárselo a los hombres. No les dijeron que en su tiempo decidieron separarse del Fuego Creador por orgullo, porque creían que ya lo eran y podían vivir felices sin El pero siendo El y se desconectaron por libre albedrío. Sobrevivían a través de bajas vibraciones como el miedo, la ira, la queja, el juicio y la culpa y querían volver a conectarse con el Fuego Creador donde no había caos y no lo habían conseguido todavía, por lo que manipularon al hombre, que la tenía. O conseguían quitarles esa conexión directa para tenerla ellos, o si no lo conseguían podían alimentarse de las bajas vibraciones que tendrían que experimentar los hombres cuando los manipularan para tenerlas, sin necesidad de que los extraños tuvieran que experimentarlas por sí mismos. Las mujeres, asustadas, vieron lo que venía después. Decidieron vaciarse de la sabiduría sagrada pero haciendo varios paquetes de información, con la intención de dificultar que los extraños encontraran toda la sabiduría sagrada. Siete paquetes de información se repartieron por el mundo en que se era, pero una vez vaciadas, también se veían más débiles para vivir en el mundo donde se había sido. Tendrían uniones con esos hombres desconectados y vaciadas de la información sagrada, se sentirían inseguras y vulnerables. Era seguro que algunas de ellas caerían también en el engaño de los extraños. Eran expertos en el arte de la mentira, y tenían conocimientos tentadores que atraerían a mujeres debilitadas por el vaciado de la sabiduría sagrada. Acercándose a ellas con cautela, les enseñaron las propiedades de las plantas, el arte de la magia para conseguir lo que quisieran, la Astronomía y la Astrología, el funcionamiento del Cosmos, el poder del ***** como medio de manipulación del hombre, todas las artes para ser hijas de Lilith y olvidarse de la que fue su Madre Tierra...y las convencieron. El Caos se apoderó del mundo donde se Era uno mismo, donde se podía experimentar sin juicio ni culpa. Sólo se necesitaba que el hombre doblegara su libre albedrío con el engaño de elevar su vibración. Y lo consiguieron. Y llegó una nueva humanidad, desconectada del Fuego Creador, perdida, anhelando esa conexión directa que algunos intentaron y consiguieron desde su corazón, pero haciendo ese esfuerzo diario cuando antes no era necesario. De las bocas de los extraños salieron juramentos de rabia al ver que no habían conseguido esa conexión quitándosela al hombre, y además no habían conseguido quitársela del todo, pero les consolaba saber que eran manipulables. Se formaron dos humanidades: la que se unió a los extraños teniendo momentos felices y momentos dolorosos según el gusto de la manipulación de los extraños, y la que en secreto, seguía todos los días conectándose al Fuego Creador. Estos últimos se fueron reconociendo y se unieron. Consiguieron, no sin esfuerzo, conectarse todos los días a lo que había sido su Fuente de Amor y Libertad, se enseñaban unos a otros y se fueron a vivir a otros lugares lejos de la influencia de los extraños. Los otros, se unieron entre ellos y con los extraños, dando lugar a una humanidad que experimentaba el dolor que alimentaba a los extraños sin ellos saberlo. Decidieron vivir en la ceguera. Era más fácil no desobedecer que hacer caso al resto de semilla del Fuego Creador que llevaban dentro y de vez en cuando les recordaba quienes habían sido. Había que esforzarse. Sudando y llorando de rabia, me desperté. No pensé que serían tan tontos de haberse dejado convencer de que con la actuación de los extraños llegarían a ser directamente el Fuego Creador y a lo que les había llevado. Esta rabia me duró varios días, hasta que acepté la realidad. No volví a soñar en un tiempo, hasta que acepté, perdoné y me reconocí como parte de todos, pero quería hacer algo, todavía no sabía qué ni cómo, pero quería volver a conectarme a ese Fuego Creador con esa parte de El que tenía dentro y que me proporcionaba muchas veces momentos de felicidad, y lo quería para todo el día, pasara lo que pasara. Aunque hayan pasado 13.000 años, no lo conseguirían conmigo. Todo llegaría, lo sabía, no me preocupaba cuando, y seguía buscando.